Somos Cuenca,
Habitantes del Biobío

Somos Cuenca es una iniciativa que busca crear y fortalecer redes de colaboración entre personas, organizaciones y los distintos actores territoriales preocupados por la conservación y restauración de los ecosistemas fluviales de las distintas cuencas del país.

El biobío es la segunda cuenca más grande  del país, una frontera ecológica que también fue la frontera histórica y cultural antes las numerosas invasiones a la zona. Desde las lagunas Icalma y Galleteu inicia su recorrido por más de 300 kilómetros, pasando por comunidades mapuches y grandes intervenciones como las centrales hidroeléctricas que restringen el uso de las aguas del Biobio a las comunidades, bosques, y habitantes no humanos.

El Biobío alberga uno de los principales polos industrial en su zona costera y  tienen un largo historial de intervenciones en sus ecosistemas, desde las centrales hidroeléctricas de los años 40 en Antuco, luego en alto biobío, junto a las extensas plantación de monocultivos que cubren toda la región. Esta sucesión de fenomenos mantienen una constante amenazas para sus ecosistemas, habitantes y tejido social, potenciada por la falta de planificación territorial, responsabilidad social y desarrollo sustentable.

Esta iniciativa surge desde la inquietud y necesidad de contar con verdaderas herramientas y políticas ambientales que nos permitan abordar con una nueva mirada los desafíos presentes y futuros que enfrentamos en el contexto de la crisis social, hidrica, política y cultural que observamos a nivel general y que tienen directa relación con nuestro vínculo roto con la naturaleza.

Mediante este proyecto buscamos consolidar una red colaborativa, que movilice a quienes creen en el poder transformador de las personas para cambiar su entorno. Involucrarse en Somos Cuenca es un viaje desde lo humano, es un recorrido desde los sentidos, la experiencia y la corporalidad, hacia un proceso que nos lleva a reconocernos en el otro con empatía y admiración.

Somos Cuenca contó en 2020 con una primera versión en la cuenca del río Maipo, que nos permitió explorar las distintas forma de vincularnos, involucrando no solo a activistas, sino que también a académicos, asambles y comtés locales, juntas de vecinos y a la comunidad en su conjunto. Esta experiencia nos permitió entender la necesidad de cambiar el relato cultural dominante en torno a la forma en que interactuamos y entender las brechas que necesitamos superar para avanzar en conjunto.

 

Esta iniciativa está apoyada por Fundación Lepe a través de su convocatoria Fondo Común, por Patagonia Chile y ejecutado en colaboración de Malen Leubu, Trawun Domoche, Fundación Pewenkem, Comité Ambiental Comunal Angol  Fundación Manzana Verde, Malvarrosa Hualpén, Antuko Resiste, Ñuble Libre, Regenerativa, Chile Birds, Limpiemos CMPC, Ríos to Rivers, Club Náutico Wampoche, Semillas de Lirquén, Rucalhue sin Represas, Comunidades Sustentables Udec, Pew Charitable Trusts, Fundación Ngenko, Proap, Departamento de ciencias UCSC, Cedeus Chile y Turismo Huella Sur.